jueves, 8 de julio de 2010

Espolón Picapiedra. Pico Inferior de la Renclusa


El sábado por la tarde engaño a Melchor y nos subimos a dormir a Benasque. A las 4.00 am se pone a llover, amenazando con fastidiarnos el día. Por la mañana al sol le cuesta aparecer y aunque tiene pinta de estar bastante húmedo, vamos a probar suerte.

Para la aproximación hay que subir a la Renclusa y desde allí dirigirse a Aigualluts, cuando se pase bajo el espolón giramos a la derecha y lo alcanzamos. En el inicio de la vía hay un mojón y una flecha un poco mimetizada, se sube por el diedro más evidente a la izquierda de una canal. Nosotros encontramos los dos primeros largos muy mojados (el contrafuerte), después salió el sol.

El trazado de la vía es muy lógico, va buscando la mejor roca y el itinerario más sencillo. Además, el hecho de que las reuniones se encuentren equipadas (espits) ayuda a orientarse. La roca es buena en todo momento y muy fácil de proteger. Pero lo verdaderamente espectacular es el entorno de la vía. El Pico de la Renclusa es un impresionante mirador desde el que se observan las Maladetas, el Alba, el Perdiguero,... Esto justificaría sin duda la ascensión, pero además la escalada es buena.

Nosotros fuimos con la reseña de Luichy, que abrió esta vía en agosto del 82 con Manel Monsonís, y está muy detallada. En el largo 5, después de la fisura, hay que salir hacia la derecha, a un diedro oculto por un espolón.

Muy recomendable.

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